Los anacardos son muy ricos en grasas saludables, proteínas vegetales, magnesio, potasio, fósforo, vitamina E, ácido fólico, selenio y fitosteroles.

Como cualquier otro fruto seco es muy importante consumirlos en crudo (sin tostar y sin sal), ya que de esta forma es como mantienen intactos todos sus nutrientes.

Los anacardos son un fruto seco muy versátil ya que se pueden utilizar para hacer postres, cremas, salsas, patés, etc.

Ahora veremos cómo hacer un yogur de anacardos, con lo que además de todos los nutrientes que ya nos aporta este fruto seco, nos aportará probióticos (producto de la fermentación) que nos ayudarán a mantener una flora intestinal saludable.

Ingredientes:

250 gr de anacardos

5 dátiles sin hueso

zumo de 1 limón

250 ml de agua

Preparación:

Remojar los anacardos al menos 4 horas.

Tirar el agua del remojo, lavar los anacardos y triturarlos en una batidora potente hasta que quede una crema bien fina.

Agregar los dátiles, el zumo de limón y el agua. Triturar.

Poner la mezcla en un pote de vidrio tapado con una gasa y dejarlo fermentar de 6 a 12 horas (cuanto más tiempo de fermentación, más ácido será el yogur).

Se puede guardar en la nevera en un recipiente tapado durante 2-3 días. El frío interrumpe el proceso de fermentación.

Servir con trocitos de fruta, nibs de cacao, semillas, etc.