Granola

Granola

Hacía mucho tiempo que quería preparar una granola casera y la verdad que pensaba que sería algo más laborioso, pero la verdad que estaba equivocada.

Es muy fácil de hacer y no tiene nada que envidiarle a las granolas elaboradas de forma industrial.

Además de ser un desayuno muy saludable y lleno de nutrientes, es delicioso y crujiente.

Lo podemos agregar a un yogur, a una bebida vegetal, al puding de chía, incluso a un zumo o batido.

Si queréis hacer la versión sin gluten podéis utilizar los copos de avena sin gluten o sustituir los copos de avena por copos de quinoa o cualquier otro cereal que no contenga gluten.

Se conserva muy bien durante una semana o 10 días guardado en un recipiente de cristal hermético.

Receta de Granola

Ingredientes:

200 gr de copos de avena

3 cucharadas de melaza de arroz

40 gr de coco rallado

30 gr de nueces crudas

30 gr de almendras crudas

30 gr de avellanas crudas

30 gr de semillas de girasol

30 gr de semillas de calabaza

30 gr de uvas pasas o arándanos deshidratados

80 gr de aceite de coco

1 cucharadita de canela en polvo

½ cucharadita de vainilla en polvo

ralladura de 1 naranja (opcional)

Preparación:

Precalentar el horno a 120º C. Forrar una bandeja de horno con papel sulfurizado.

Tostar los copos de avena en una sartén hasta que comiencen a cambiar de color y reservar. Repetir el proceso con los frutos secos y las semillas.

Por otro lado mezclar el aceite de coco con la melaza de arroz hasta que quede un líquido homogéneo. El aceite de coco debe estar líquido, si no es así, calentarlo a baño María hasta que adquiera esta consistencia.

Trocear los frutos secos y las semillas y mezclarlos con los copos de avena. Agregar la canela y la vainilla.

Agregar la mezcla líquida (del aceite con la melaza) y mezclar bien hasta que quede todo impregnado.

Poner en la bandeja de horno y hornear ente 20-30 minutos removiendo de vez en cuando para que no se peguen.

Cuando falten 4-5 minutos agregar el coco rallado, las uvas pasas y la piel de naranja.

Dejar enfriar y conservar en un bote de vidrio hermético.